jueves, 20 de noviembre de 2008

días de frío

Os presento a Benamaurel, pueblo alado y helado de frío.
Muy chiquito, de apenas dos calles, literalmente.
Es una maravilla, llena de vida, de costumbres, aunque no de gente, claro está.
Si queréis saber dónde estoy, buscadme aquí, y donde encontréis a una chica muerta de frío pero encantada de la vida esa soy yo.
Os dejo una foto del pueblo en sus fiestas de los moros y cristianos, la más importante del año.
Visítenla.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Perdón

No quiero volver a verte”. Esas fueron mis últimas palabras antes de marcharme con un portazo de mi casa.
Desde entonces, hasta ahora no había vuelto a la casa. Desde entonces hasta ahora, no nos habíamos vuelto a ver. Había sido más que mi novio, había sido mi compañero, mi hermano, mi confidente, todo se lo había contado. Nos conocíamos desde niños y nos hicimos amigos en la infancia, nos enamoramos en la adolescencia y ahora, decidíamos formalizar nuestra relación. Sin embargo, aquella tarde, Antonio daba marcha atrás a todo.
Mil excusas escucharon mis oídos: estoy agobiado (yo te ayudo), me trasladan a otra ciudad y no quiero que lo dejes todo por mí (no me importa, busco otro trabajo) No estoy seguro de nuestra relación ( ¿a estás alturas?). He conocido a otra persona (por ahí no paso) No quería seguir adelante, no quería que compartiésemos nuestra vida, ahora que lo compartíamos todo.
- No lo entiendo, de verdad. No sé por qué me vienes con esas ahora. Lo he dejado todo por ti, y no me arrepiento. De hecho, si me dieran a elegir lo volvería hacer sin lugar a dudas. Pero creo que me merezco una explicación.
- No puedo darte ninguna. Solo que creo que ya no te quiero. Creo que necesito volar solo.
- Solo!!! Ahora???
- Sí, ahora. Lo único que he hecho en la vida ha sido estudiar, trabajar y estar contigo.
- Y yo!! Y a mí me ha bastado!!
- Pues a mí no, lo siento.
- NO QUIERO VOLVER A VERTE.
Sin embargo, no fue así.
Hoy he recibido una carta, Antonio está enfermo y no quería que yo sufriera con él, no fue falta de amor, fue demasiado amor.
Salgo corriendo y cojo un taxi que me lleva hasta la casa. Llamo y me abre la puerta.
- Lo siento.
- Y yo. No quiero que vengas aquí a cuidarme.
- Estoy aquí para quedarme.

viernes, 14 de noviembre de 2008

Belén. 16/11/2008

Yo no soy muy ducha en escribir de temas personales, pero en esta ocasión haré una excepción.

Quiero dedicar esta entrada a mi nueva compañera de piso, Belén. Quiero que sea éste mi regalo particular de cumpleaños.

Quiero felicitarte por tus años, pero también felicitarte por ser como eres. Es difícil encontrar en los tiempos que estamos a personas con bondad, que sean tan sincera a la vez que humilde.
Belén, compañera-amiga, ese ser que apareció casi desapercibida. Que cumple veinti... pero que no parece más de 22, físicamente, claro... Bueno, tampoco en su manera de ser.

En fin, que me quedé sin palabras,pero que desde lo más sincero de mí, solo me sale decir que es una bella persona, divertida, graciosa, con quien compartir experiencia pero que mantiene su personalidad y con carácter, como debe ser.
Ya solo queda esperar, que el tiempo siga su curso y la historia también y que no acabe la confianza en el curso escolar, sino más bien, que el curso escolar sea la excusa para mantenerla y seguir aprendiendo de ella.
Feliz Cumpleaños, Compañera!!!